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El equipo TIMBERSATU está formado por Irene Bernalte, Sofía Montón, Alba Castellano Ros, Lucía López, Maria Martínez, Marisa Medina (alumnas de 2º de ESO), Txell Morata, Àngels Puigdefàbregas, Raquel Giménez, Mònica Giménez, Sara Torrubiano (alumnas de 3º de ESO) y Paula Minchot y Maria Rodríguez (alumnas de 4º de ESO). Todas ellas alumnas de la institució La Vall.
Cabe destacar que La Vall ha participado en numerosas ocasiones en las finales nacionales de esta competición y que es la cuarta vez que participa en una final internacional: 2010 en Atlanta (equipo Blau), 2011 en Delf (equipo Pim-pam), 2017 en Tenerife (Kronos) y 2022 en Arkansas (Timbersatu).
Del 19 al 22 de mayo de 2022, vivieron una experiencia única participando en la First Lego League, competición celebrada este año en la Universidad de Arkansas.
Según el equipo "Nos encanta la robótica. Hace ya más de tres años que estamos
participando en la FFL, la competición de robótica, donde además de diseñar y programar un robot, tenemos que llevar a cabo un proyecto de innovación sobre un tema propuesto y demostrar que sabemos trabajar en equipo".
En los últimos tres años, TIMBERSATU ha ganado la fase regional y se clasificaron para la Final Nacional, pero el Covid-19 impidió que se celebrara la competición de manera presencial, por lo que la pasaron a un formato online. A pesar de los contratiempos, el equipo no se desanimó y siguió luchando para llegar a la final internacional, y es que a la tercera va la vencida y después de participar en la final nacional de este año celebrada en Torremolinos, consiguieron clasificarse para el Open International de Arkansas.
A pesar de la buena noticia, los costes de la preparación para la Internacional eran sumamente altos, así que el equipo puso foco en encontrar a los patrocinadores del proyecto, de entre los cuales destacan: EPLAN, HP, Agbar y JP Industries.
El proyecto
Este año, el proyecto propuesto estaba relacionado con "CARGO CONNECT", y el proyecto del equipo trataba "AIR-NER", un dispositivo que busca solucionar la perdida de contenedores que caen en el mar por culpa de, entre otras causas, las tormentas, una mala sujeción o una sobrecarga de los barcos.
Consiste en una especie de airbags que se colocan en los laterales de los contenedores y un sistema balizamiento, iluminación y GPS, todo conectado a una placa base y con un sensor de presión.
Cuando el sensor de presión detecta un aumento, por el hecho de que el contenedor se esté hundiendo, abre los airbags y las luces que se encuentran escondidas en las dobleces de los contenedores y envía una señal.
De esta manera, el contenedor flota y queda bien señalizado para evitar accidentes, a la espera de ser rescatado.
Aquí puedes ver el vídeo con la idea del prototipado del proyecto:
Desde EPLAN, no hemos dudado en dar soporte al equipo ganador de esta merecidísima cuarta posición. Se trataba de un gran proyecto, con un equipo muy implicado, trabajador, con una gran motivación e ilusión por aportar innovación y soluciones a una problemática existente en el sector marítimo.
La alianza EPLAN - La Vall, ha servido para dar soporte y visibilidad a las bases para estas ingenieras del futuro. ¡Y para los siguientes en los próximos cursos!
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